Cap.27.-

*Narra Noelia*

Una semana después de estar en observación por fin me daban el alta. Y es que no hay nada mejor que la comodidad de casa. Mañana ya empezaría la universidad y aunque todos se empeñen en decirme que es mejor que espere unos días antes de entrar yo estoy perfecta, no quiero perder ni un solo día. Aunque igual era un poco tarde ya y tenía que descansar, ya decidiría mañana si iba o no.

- ¡Noelia, a cenar!- gritó Lía desde abajo.

- En seguida bajo.- terminé de ponerme el pijama y bajé corriendo a la cocina.

- ¡Ve con cuidado Noelia! No quiero más accidentes.- me regañó Melissa.

- Si, si, ¿y la comida? Tengo hambre, la del hospital es un asco, no sabe a nada, así que… ¿Dónde está esa rica cena de Carlota?

Al segundo Aya apareció con una olla seguida de Carlota quien traía los platos y la cubertería. Uhm… ese olor… Respire profundo antes de abrir la tapa que solté en seguida por lo que quemaba.

- Cuidado no te vayas a quemar eh…-rió Lía.

Cogí un trapo para levantar la tapa y ponerla a un lado de la mesa. Dios, me había hecho lentejas, la comida más rica sobre la faz de la tierra, no hay nada que me guste más, aparte de las judías, pero lentejas… se me hace la boca agua solo de pensar que voy a comerlas.

La cena transcurrió en silencio y es que estaban algo raras. Melissa no dijo ni “pío” cuando normalmente no hay quien la calle. Aya estaba en su mundo mirando la tele. Lía… bueno a Lía le iba y le venía todo un poco, acabó de comer y se quedó en la mesa jugueteando con las migas de pan que le habían caído, pero la más rara era Carlota, no había tocado casi el plato y se la veía desanimada, preocupada…

- ¿No te gustan Carlota? Porque te han quedado riquísimas.

- No, no es eso… no tengo demasiada hambre la verdad…

- Que raro, ¿estás segura de que estas bien?

- ¡Mierda!- gritó Aya desde el salón.- ¡Mierda, mierda, mierda… que me ha bajado, me ha bajado… ay, ay, ay! Que oportuna es…- ironizó mientras iba corriendo al baño.

Las demás empezamos a reírnos pero cuando nos dimos cuenta Carlota se echó a llorar desconsoladamente.

- Hey, ¿Qué pasó Lottie?- pregunté preocupada.

- ¿Estas llorando por qué a Aya le bajó la regla?- bromeó Meli.

- ¡No! Estoy llorando porque a mí no me bajó…- abrimos los ojos como platos y nos quedamos mirándonos las unas a las otras.- Me tenía que haber venido hace cinco días más o menos y aún no me vino…

- Bueno Carlota, relájate, será un pequeño retraso, a mi hay veces que me pasa.- la alentó Lía.- Además, ni que lo  hubi… ¡Lo hiciste!

- Si…

- No hace falta preguntar con quien, eso lo sabemos de sobra ya.- reí.

- ¡¿Lo hiciste sin protección?!- preguntó Aya alterada entrando de nuevo en el comedor.

- Yo…el… es que estábamos… y entonces…

- Relájate anda, seguro que no es nada. Ahora será mejor que no pienses en eso.- le dijo Meli.

Seguimos un rato en silencio, cada una pensando en sus cosas, yo por mi parte me preguntaba que podía pasar si Carlota llegara a estar… bueno… en estado de “buena esperanza” entre comillas, porque para ella no sé si es muy buena noticia esto… Al cabo de media horita mas nos fuimos todas a dormir, mañana sería un día muy largo.

*Narra Carlota*

Me levanté tras el sonido del despertador, ya eran las siete de la mañana y, aunque aún faltaba media hora para que se despertaran las demás, así que decidí no molestarlas. Fui a la cocina a prepararme el desayuno. Estaba cansada, no había pegado ojo en toda la noche pensando en el “¿Qué pasaría si…?”. Alcé la vista al reloj innumerables veces, el minutero parecía marcar siempre la misma hora.

No aguantaba más, me calcé, me puse un abrigo por encima y cogiendo la bandolera con los libros salí de casa dirigiéndome hacia la farmacia. Cuando llegué eran a penas las siete y media y ya estaba abierta. No paraba de temblar, no sé si por el frío de la mañana o por los nervios que tenía. Entré y me dirigí vacilante hasta el mostrador.

- Buenos días.- saludó la farmacéutica con una sonrisa alentadora.- ¿Qué desea?

- Bu… bueno, yo…- respira Carlota, no es para tanto, chicas mas jóvenes que tu se han enfrentado a esto, vamos, 1… 2… 3.- Desearía un test de embarazo por favor.