*Narra Carlota*
Salimos por
la puerta y los chicos ya nos estaban esperando para irnos a comer fuera.
- ¡Hola
chicos!-exclamamos.
- ¡Que
felices se os ve! ¿Ya arreglasteis la llave del agua?
- Ojalá Liam,
ojalá.-suspiró Aya.
- Podéis
venir siempre que queráis.- rió Harry mientras enroscaba un mechón de mi pelo
en su dedo.
- Que mono,
gracias.-contesté sonrojada.
- ¿Y si nos
dejamos de arrumacos y nos vamos a comer ya?-protestó Noelia.
- Si, que me
muero de hambre y mi estomago empieza a hablar, y no es nada bueno que mi
estomago hable.- poniendo cara de enfado.
Los chicos se
empezaron a reír mientras nosotras nos mirábamos extrañadas, resultaba graciosa
la cara que tenía Niall. Cuando llegamos al lugar nos sentamos en una mesa
amplia de la esquina y estuvimos conversando.
- Y dime… ¿a
qué te dedicas Carlota?
- Estudio,
nos mudamos hace 3 días por unas becas universitarias.
-
¡Fascinante! (ríe) ¿y haces algo más?
- Bailo, me
encanta el baile… ¿tú?
- Vaya, pues
yo… ¡yo sé cocinar!- no pude evitar reír, casi me atraganto con el agua.- ¡No
te rías! Es cierto… y hasta hace poco estuve trabajando en una pastelería…
-¿Estuviste?
- Me echaron
por culpa de Niall.- le lanzó una amenazante mirada mientras él se limitaba a
seguir comiendo.- Es que… un día se comió todos los bollos de un cliente y
bueno… cargué con las culpas.
- Eso es de
buenos amigos.-sonreí.-¿Y ya no trabajas?-el negó con la cabeza.- ¿Y eso?
- No me hace
falta, mis padre me dijeron que se encargarían de mi hasta que acabara mis
estudios.-sonrió.
*Narra Noelia*
- Que bien
que al final volvimos a vernos ¿no crees?
- Si, aunque
nunca llegue a pensar que fueras mi vecino…
- Es que
cuando me llamaron justo iba a decir que yo también vivía a unas tres manzanas
a la izquierda del supermercado.
- No pasa
nada.-sonreí
- Y cuéntame…
¿Qué hace una española tan guapa como tú en Londres?
-(Me sonrojé)
Bueno…pues, nos dieron unas becas en la universidad de artes y nos mudamos.
- Ah, si, ya
me habías dicho algo de eso.-sonrió.-¿Y algo más?
- Aparte de
comer y dormir todo lo que pueda…-soltó una leve carcajada, “que risa tan
bonita tiene” pensé.-… también me gusta leer y el teatro, estoy aprendiendo
guitarra, no soy muy buena, pero lo intento.
- A mí me
encanta la guitarra, ¿quieres que algún día te enseñe?
- ¡Claro!
Sería estupendo…- dije mientras acercaba mi tenedor a su plato.
- Yo que tu
no haría eso.-interrumpió Liam de repente.- te dejaría sin mano.-rió
- Mentira, yo
con ella si que compartiría mi comida.
- ¡Oooh!
Nuestro querido Niall se ha enamorado.- añadió Harry, noté como empezábamos a
ponernos rojos los dos…
-
Yo…yo...esto…
- Yo también
la compartiría con él y contigo no, por malo.- nos defendí sacándole la lengua
a Harry, Niall sonrió y seguimos comiendo.
*Narra Aya*
- Así que la
universidad de artes ¿eh?
- Si, aquí
todas somos unas artistas.-reí
- ¿Si? ¿A ti
que es lo que te gusta?
- Estudio
arte dramático, me gusta leer y… ¡ah! Me encanta el chocolate.- ambos reímos.
- Eso a mi
también. ¿A que universidad tenéis pensado entrar?.-sonrió.
- A la de
Saint Martins, ¿sabes cual es?
-Claro,
nosotros solicitamos plaza en ella.
-¿A si?
Entonces nos veremos mas seguido.-reí.- ¿en que te matriculaste tu?
-Si, en
música.
- Que
guay.-sonreí.-Oye… ¿y tus otros dos amigos por qué no han venido?
- De repente
dijeron que no les apetecía venir, así que se pasarán toda la tarde en casa sin
hacer nada…
- Lo mismo
dijeron las chicas en vuestra casa, no les apetecía, pero ellas irán al parque
esta tarde… ¿después de comer que haremos?
- No sé, ¿y
si vamos a dar un paseo y os enseñamos un poco la ciudad?
- Si, estría
muy bien.- terminamos de comer y salimos de allí.
Nos llevaron
por la ciudad y nos enseñaron muchas cosas y sitios que visitar, era tan bonito
que menos mal que le pedí a Melissa su cámara porque empecé a sacar fotos como
una loca.
*Fin de la narración*
Mientras Lía
acababa de poner la mesa, prendí el equipo de música y me fui a hacer las
camas, montamos cada día un pequeño concierto ya que a ambas nos encanta
cantar.
- ¡Ya está la
comida!- bajé y nos sentamos a la mesa.
- ¿A dónde
iremos primero?
- Al conser,
así tendremos el resto de la tarde libre.
- Perfecto,
¿ya miraste lo del coro?
- Si, bueno,
en la universidad hay uno.
- ¿Si? Genial
entonces.
- Deberías
apuntarte.
-¿Yo? (reí)
Ya sabes que yo canto por libre.
Estuvimos un
buen rato discutiendo ese tema mientras acabábamos de comer. Nada más terminar,
después de ver la tele durante un rato, salimos directas al conservatorio, al
entrar nos quedamos fascinadas, era enorme, le hicieron la prueba de acceso de
piano a grado superior por mayoría de edad y aprobó. Al salir Lía estaba
contentísima. Llegamos al parque y cuando nos dirigimos a las rampas un montón
de chicos se nos quedaban mirando, al parecer, éramos las únicas. Subimos y la
primera en animarse fue Lía, siempre tan atrevida…empezó a hacer piruetas
mientras los chicos silbaban, yo me quedé un poco rezagada en un rincón hasta
que me dijo que me tocaba a mi, mi cara se volvió un poema, yo aun estaba
aprendiendo, no me podía poner a hacer todo eso.
- ¡Ni loca,
Lía sabes que yo no!
- ¡Anímate!
Vamos, yo te miro desde aquí.
Suspiré y
temblándome las piernas subí, Lía me hizo un gesto con el pulgar arriba y me
lancé, ¡no me lo podía creer! Lo estaba haciendo, lo estaba haciendo bien,
hasta que vi a dos chicos que me resultaron familiares y la tabla se me desvió
y caí de morros contra el suelo.
- ¡Mierda!
Melissa, ¿estás bien?- Lía corrió hacia mi pero un gran número de personas le
impedían el paso, de repente un chico me tendió la mano.
- ¿Thomas?
- Nos volvemos
a ver…
- ¡Oh
Thomas!- salte a sus brazos y lo abracé.
- Salgamos de
aquí anda que todos nos miran extrañados…-me llevó a un banco donde estaba Lía
sentada con Alex… ¿Alex? ¿Thomas? ¿Qué hacían ellos aquí?
Thomas y Alex
eran nuestros mejores amigos antes de que vinieran a mudarse a Londres cuando
sus padres decidieron casarse y comenzar aquí una nueva vida, son hermanastros
pero se llevan muy bien, Alex siempre estuvo enamorado de Lía y Thomas y yo le
hacíamos un montón de perrerías al pobre… Hacía muchos años que no los veíamos
y estaban muy guapos, nunca pensamos que volveríamos a encontrarnos.
Alex:
Thomas:
- Meli, mira
quien está aquí… ¡Thomas!- corrió a abrazarlo.- Joo… cuanto tiempo hacía que no
os veíamos chicos.
- ¡Melissa!
Cuantos años ya…-vino Alex a abrazarme.- ¿Qué te ha pasado?
- Pues que os
he visto y me quedé tan confusa por que no sabía si erais vosotros que me he
pegado un porrazo contra el suelo.- Se empezaron a reír a carcajadas.
- Tú siempre
en el suelo… pero no lo hacíais mal, os estuvimos viendo… Al principio no os
reconocí pero cuando Alex dijo “¡Mira! Son Melissa y Lía” os recordé y bueno…
Estuvimos
charlando con ellos toda la tarde, recordando viejos tiempos y riendo por todo,
nos llevaron a una tienda de granizados mientras nos enseñaban algo de la
ciudad. Al final cuando ya oscureció nos acompañaron a casa y nos despedimos de
ellos, nos pasamos los números de teléfono para volver a verlos otro día. Antes
de entrar oímos unos ruidos y vimos aparecer a Louis y a Zayn por el jardín de
NUESTRA casa.
- ¡¿Y ellos
quienes eran?!- preguntó Zayn con todo el descaro del mundo.
- ¡¿Y
vosotros que mierda hacéis en nuestra casa?!-gritó Lía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario